VILLANO | Arias no supo leer el clásico y se vio la peor cara de la ‘U’

El DT de Universidad de Chile buscó plasmar un planteamiento que desde el arranque se vio que no tendría buenos resultados, pero no tuvo un plan B y tampoco estuvo claro en las sustituciones. Así el ‘Romántico Viajero’ se vio sobrepasado de principio a fin y fue goleado por Católica.

Si bien el arribo de Alfredo Arias había logrado mejorar en algo la parte futbolística de Universidad de Chile –aunque sin grandes resultados-, lo mostrado en San Carlos de Apoquindo fue la peor cara del elenco azul en el presente Campeonato Nacional, lo que aumenta la preocupación en un elenco que marcha penúltimo y parece no tener las armas futbolísticas, anímicas ni técnicas para salir del fondo.

El estratega uruguayo quiso mantener su esquema de 3-5-2 en la visita al campeón chileno, lo que terminó siendo un suicidio, pues su línea defensiva jugó mano a mano y sufrió contantemente por las bandas. Los laterales volantes no funcionaron ofensiva ni defensivamente, mientras que el medioterreno sucumbió y los atacantes no causaron daño.

Y eso quedó claro desde el arranque, pero Arias no tuvo plan B y mantuvo todo tal cual. Así aguantó un primer tiempo, donde sólo la poca eficacia de la UC mantenía el 0-0. Pero en el complemento se destaparon los ‘cruzados’ y se vio lo peor de la ‘U’.

Las sustituciones tampoco surtieron efecto, pues los ingresos de Espinoza, Guerra y Ubilla no fueron ninguna solución, es más contribuyeron al caos de los laicos. La ‘U’ sigue en el penúltimo puesto del Campeonato Nacional y podría quedar colista si Cobresal suma de a tres ante la ‘UdeC’.

El estratega de Universidad de Chile no supo leer el encuentro, perdió la batalla táctica con Gustavo Quinteros y fue incapaz de levantar a su equipo. Con hidalguía asumió su responsabilidad al término del encuentro, pues dijo que “mis decisiones perjudicaron al equipo”.

Más allá del mea culpa, la ‘U’ necesita un remezón y una rápida reacción si quiere escapar de su complicada ubicación, de lo contrario lo terminará lamentado al final del año.