lunes 30 mayo, 2022
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60 años de un hito: La dura ruta de Chile para tener el Mundial 1962

Gracias a la representación de Carlos Dittborn y Juan Pinto Durán para convencer a la FIFA, la séptima edición de la Copa del Mundo terminó en Chile. Pero en el camino hubo grandes piedras que pusieron en peligro la realización del Mundial, entre ellas el terremoto más grande de la historia.

Por Sebastián Cornejos N.

Este 30 de mayo se cumplen 60 años de un hito histórico y emblemático para el deporte chileno: el inicio del Mundial 1962. Un torneo que pareció una quimera, pero que el convencimiento de un grupo directivo permitió concretar. Y cómo no, si tras 12 años de Brasil 1950, Chile se transformó en el lugar que albergó el retorno de la Copa del Mundo a Sudamérica.

No obstante, hubo una serie de problemas que pusieron en riesgo la realización del recordado certamen en suelo nacional. Por eso, en Prensafútbol rememoramos este hecho histórico y el difícil camino que sorteó Chile en la organización del evento.

«PORQUE NO TENEMOS NADA, QUEREMOS HACERLO TODO»
Tras las ediciones de 1954 y 1958 en Suiza y Suecia, respectivamente, la máxima cita del balompié correspondía ser realizado en un país de este lado del mundo. Chile había inscrito su candidatura y llegó al Congreso de la FIFA en Lisboa 1956 con la posibilidad de quedarse con ese ansiado cupo.

Pero Argentina corría como clara favorita al tener una mejor infraestructura, un país en mejor, razón por la cual su representante en el cónclave, Raúl Colombo, lanzó una categórica frase que sirvió como arenga para nuestro país: «Podemos hacer el Mundial mañana mismo, lo tenemos todo», dijo el delegado trasandino.

Un día después fue el turno de Chile, que a través de sus históricos dirigentes Carlos Dittborn y Juan Pinto Durán se jugaron la gran opción de poder ser sede de la cita mundialista. Dittborn, presidente del Comité Organizador fue el encargado de dar el discurso ante la FIFA, donde manifestó a favor el clima deportivo, continuidad en asistencia a torneos y estabilidad política e institucional.

Sin duda uno de los grandes mitos que se generó allí fue la icónica frase que lanzó el propio dirigente tiempo después al medio El Mercurio y que trascendió por generaciones: «Porque no tenemos nada, queremos hacerlo todo», algo que surgió como respuesta al planteamiento argentino en la FIFA.

La votación de realizó y tuvo como resultado 32 votos a favor de Chile, 10 para Argentina y 14 en blanco. De esta forma, Pinto Durán y el oriundo de Rio de Janeiro lograron algo inédito: el Mundial de fútbol sería albergado en territorio nacional.

UN TERREMOTO QUE CASI DESTRUYE SUEÑO MUNDIALISTA
Con el apoyo del en ese entonces Presidente de la República, Jorge Alessandri Rodríguez, se dio paso a la modernización estructural del país mediante una importante inversión (infraestructura recintos deportivos, comunicaciones y transportes), pues para la mayoría de los países europeos, Chile era muy subdesarrollado para estar a la altura de la organización de tal evento.

En un principio se tenía contemplado a Talca y Concepción entre las ciudades para ser sedes de los partidos mundialistas, pero todo cambió el 22 mayo de 1960. Ese año estuvo marcado por el terremoto en Valdivia, que tuvo una magnitud de 9.5 y provocó un tsunami que sacudió al país y arrasó con gran parte de las ciudades sureñas, incluso modificando la geografía como se conocía hasta ese instante.

La tragedia dejó alrededor de 2000 personas fallecidas, 2 millones de damnificados y de Talca a Chiloé en el suelo. El sismo más grande de la historia parecía haber acabado con la ilusión de recibir el Mundial 1962, pero el Presidente Alessandri le había dado su palabra a Carlos Dittborn y no pensaba poner marcha atrás.

El Gobierno de Chile se movilizó para seguir restructurando el país y recibió ayuda monetaria por parte de la FIFA y el Comité Organizador fue apoyado por algunas federaciones de fútbol.

Finalmente, se logró la restructuración del país y la realización de la Copa del Mundo en Chile fue una realidad. Las sedes habilitadas para la competición fueron Santiago, Arica, Viña del Mar y Rancagua, esta última facilitando su estadio gracias a Braden Copper Company, dueña de la mina El Teniente.

EL DURO SORTEO Y LA PARTIDA DE LOS GRANDES ESTANDARTES DE LA ORGANIZACIÓN
Llegó el 18 de enero de 1962, fecha en que se desarrolló el sorteo del Mundial a disputarse prontamente en Chile. La ‘Roja’ de Fernando Riera quedó en un difícil grupo B junto a Suiza, Italia y Alemania Federal.

Grupo A: Unión Soviética, Uruguay, Colombia y Yugoslavia.
Grupo B: Chile, Suiza, Italia y Alemania Federal.
Grupo C: Brasil, México, Checoslovaquia y España.
Grupo D: Argentina, Inglaterra, Hungría y Bulgaria.

En 1957 falleció Juan Pinto Durán en un accidente automovilístico. Quien fuera uno de los hombres claves para llevar la cita mundialista a territorio nacional no pudo ser testigo del histórico hito. Actualmente el Complejo Deportivo que es centro de entrenamiento y concentración de la selección chilena lleva su nombre.

Pero no sería la única partida. El 28 de abril del ’62, a solo un mes del arranque de la Copa del Mundo, se produjo el deceso del emblemático dirigente y presidente de aquel Comité Organizador, Carlos Dittborn. La causa de muerte fue por una pancreatitis aguda. El estadio de Arica lleva su nombre en la actualidad.

Los grandes estandartes de llevar el Mundial al país ya no estaban, pero las ganas de la sociedad de disfrutar y albergar el torneo estuvieron muy presentes. Los chilenos transformaron el evento en una fiesta: la televisión por vez primera transmitió partidos en directo, se colocaron TV en las calles, se organizaron las primeras barras y compusieron canciones. Finalmente, pese a no tener nada, Chile demostró que pudo hacerlo todo.

Publicado en: Noticias
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