El invierno ha llegado y con ello los virus y enfermedades con el frío que hace de las suyas para resfriar a la gente. Las defensas en esta época del año suelen bajar y pillar desprevenido a más de uno y tener que visitar a los doctores.
Por ello combatir el frío es fundamental para que los virus no entren a tu cuerpo y puedas pasar un invierno tranquilo, evitando también contagiar de los resfriados a tu círculo cercano y a tus seres queridos.
Evitar cambios bruscos de temperatura
Los cambios bruscos de temperatura es de las principales razones por las que los resfriados ocurren, en la que los expertos en el área de la salud recomiendan evitarlos a toda costa.
Sobre todo si viene de lugares cerrados y que tienen temperatura caliente, lo que significa un resfriado breve.
Remedios caseros: una solución para aliviar el resfriado
Los remedios caseros son muchas veces soluciones válidas y que los expertos recomiendan para combatir los resfriados, pues estos suelen ser lo que muchas veces está más a mano para calmar los virus y evitar que escale a algo mayor.
Ejemplos de algunos remedios caseros son la limonada con miel, para aliviar el dolor de garganta o también el Mentolatum que es una solución efectiva para las narices tapadas y descongestionar las vías respiratorias.
Una buena hidratación: clave para evitar resfriarse
La hidratación es otro factor importante en el resfriado, básicamente esto permite limpiar los virus que se encuentran en el cuerpo, permitiendo también estar fresco para combatir los malestares.
Aceitunas para el dolor de estómago
Cuando el dolor de estómago ataca el cuerpo, una de las recetas caseras para curar el malestar es la aceituna.
Esto por qué de esta manera el cuerpo protege los dientes de las altas dosis de jugo gástrico que se eliminan a través del vómito.
Azúcar: un remedio infalible para el Hipo
Según un estudio que realizó el científico Edgar Engelman. El azúcar puede funcionar para quitar el Hipo, siendo la receta una cucharada de azúcar blanco granulado. Esto modifica los nervios de la boca evitando que los músculos en el diafragma se contraen espasmódicamente.
