Gianluigi Buffon reveló su larga y dura lucha contra la depresión

El arquero italiano Gianluigi Buffon, de pasos destacados por el Parma, Juventus, PSG y la selección Italiana, analizó en una carta autobiográfica su larga trayectoria en el mundo del fútbol, los problemas que tuvo para gestionar el éxito y su lucha para vencer la depresión.

No todo lo que brilla es oro. Y bien lo sabe Gianluigi Buffon. El arquero de 41 años contó en una desgarradora carta lo complicado que fue para él la depresión que lo afecta desde los 26 años, de la cual pudo salir por la cultura y aprendiendo a apreciar «las pequeñas cosas», según se pudo leer en su publicación en The Players Tribune.

«Si vives de forma nihilista, fijándote solo en el fútbol, tu alma empezará a cambiar. Al final estarás tan deprimido que ya no tendrás ganas de levantarte», redactó el meta en una misiva que se dirigía a él mismo cuando tenía 17 años y recién comenzaba su prometedora carrera.

‘Gigi’ añadió que «en solo unos días recibirás tres cosas que son muy, muy intoxicantes, pero también muy, muy peligrosas: dinero, fama y el trabajo de tus sueños. Ahora, seguramente estás pensando: ¿Qué podría ser peligroso de todo esto? Bueno, esto es una paradoja. Por un lado, es cierto que un arquero necesita confianza. Necesita ser valiente. Si le das a un directivo la opción entre el portero más técnico del mundo y el portero más valiente del mundo, te garantizo que elegirá al ‘bastardo’ intrépido cada vez».

El campeón del mundo en 2006 escribió también que «una mañana, cuando salgas de la cama para ir a entrenar, tus piernas comenzarán a temblar sin control. Estará tan débil que no podrá conducir un coche. Al principio, pensarás que es solo fatiga o un virus. Pero luego empeorará. Todo lo que querrás hacer es dormir. En el entrenamiento, cada parada se sentirá como un esfuerzo titánico. Durante siete meses, tendrá dificultades para encontrar alegría en la vida. Tu rutina puede convertirse en una prisión».

El prestigioso arquero italiano argumentó que su depresión se dio a la rutina de los partidos y los entrenamientos “te conviertes en un robot”. Pero cuando ya se encontraba sin fuerzas y parecía que la depresión le ganaba, decidió cambiar las cosas rutinarias de su día y empezó a visitar museos.

Buffon sentenció que lo importante de mantenerse como un «hombre normal, como todos a pesar de todo el dinero, éxito y fama que se puede conseguir en una meteórica carrera como futbolista profesional. Es importante porque el mundo del fútbol tratará de convencerte de que eres especial, pero acuérdate de que no eres distinto con respecto al hombre del bar o al electricista, de los que eres amigo».