De un temeroso primer tiempo, a un cierre letal: Así el Real Madrid levantó una nueva Champions League

Tras su victoria en la final ante el Borussia Dortmund, el Real Madrid estiró su superioridad en toda Europa con su 15° título de la Champions League, el club más ganador de este certamen internacional y con vasta diferencia (Le sigue el AC Milan con 7). A pesar de no haber realizado un buen primer tiempo, la Casa Blanca supo administrar el partido como últimamente suele hacer a su manera para resolverlo en los minutos finales del segundo tiempo.

Asfixiante presión del Dortmund

Fueron muy buenos primeros minutos y, en general, primer tiempo del Borussia que se plantó sin miedo en Wembley ante un Madrid dubitativo y que no daba buenas señales, sobre todo, en la defensa.

Principalmente con el mediocentro, Eduardo Camavinga, y sus dos centrales, Nacho Fernández y Antonio Rudiger, quienes constantemente tuvieron problemas a las espaldas ante punzantes extremos del Dortmund como Jadon Sancho y Karim Adeyemi, y su delantero, Niclas Füllkrug.

De hecho, fueron los laterales, Daniel Carvajal y Ferland Mendy quienes se llevaron mayormente el peso del ataque del Dortmund y la defensa del Madrid. De hecho, uno de los más destacados fue el lateral francés, cual muro impasable ganó todos los duelos que disputó (7/7) y no falló ninguno de sus pases (100%).

De no ser por quien fue una de las figuras de la primera parte, el portero Thibaut Courtois, más que seguro que el Madrid se habría ido en desventaja al descanso.

Por el contrario, ni Vinícius ni Rodrygo lograban generar algún peligro serio al arco de Kobel. De hecho, apenas un remate de Valverde y otro de Vini que no asustaron en demasía al portero suizo.

Un letal segundo tiempo, así juega lo gana el Madrid

Sin embargo, todo cambió con el correr de los minutos en la segunda parte. Los laterales del Dortmund comenzaron a quedarse mientras el Madrid recuperaba terreno, principalmente, a través de un excelente Toni Kross quien, en honor a su último partido ad portas del retiro, fue el alma del mediocampo madrileño y además sirvió con la asistencia de córner para el cabezazo y gol de Carvajal.

Por otra parte, otros jugadores también buscaron su opción de brillar, como Bellingham quien tuvo una muy clara frente a Kobel luego de la dejada de Vinícius. Asimismo, también lo buscaron Kroos, Fernández y Camavinga, pero si aquello no fue suficiente, debió aparecer el diferente, Vinícius Jr.

El extremo brasileño apareció en los minutos finales y marcó la diferencia, siempre presente. A los 82’, la equivocación de Maatsen quien erró el pase al medio, un atento Bellingham quien ya se aprestaba a recibir el esférico, incluso, antes del error del lateral neerlandés, y la apertura hacia Vinícius quien recibió sin marca y definió sin problemas para cerrar la victoria.

Un desarrollo de partido y una victoria, no igual, pero casi calcada a lo que fueron los partidos de cuartos de final, especialmente las revanchas, ante Manchester City y Bayern Múnich en la semifinal. 

Un partido donde el Real Madrid se hace el muerto, juega con su rival, deja que se confíe y ataque, sin embargo, por algo es el Rey de Europa, estaba destinado a ganar de esta manera. Primero aguantar, después matar.