Tottenham derrotó a Manchester United y se coronó campeón de la Europa League

En una final teñida inglesa, Tottenham se coronó campeón de la UEFA Europa League tras imponerse en un ajustado 1-0 ante Manchester United en el estadio San Mamés de Bilbao. Partido que se resolvió por una única acción de un autogol y un United desesperado que nunca le encontró la fórmula al partido.

Había sido un buen arranque de Tottenham en los primeros 10 minutos, inicialmente a los 9’ con un centro peligroso de Pedro Porro para Richarlison y una mala salida de Onana, y luego con un remate de Pape Sarr frenado por Maguire.

Posteriormente el partido se estancó, muy férreo en mediocampo, poca elaboración de jugadas, demasiados pelotazos que no encontraban a nadie y muchas faltas que frenaban el desarrollo.

Sin embargo, poco después y ad portas del descanso llegó el grito de gol que desniveló la balanza. A los 42’, el centro de Pape Sarr, el leve toque de Brennan Johnson y el rebote que dio entre el pecho y el brazo de Luke Shaw para enviar el balón al costado lateral interno de la red, sin reacción por parte de Onana.

Tras el inicio del segundo tiempo, el partido fue casi completo para el United en cuanto a dominio, pero sin concretar ni finiquitar sus jugadas. Tottenham puso atención a esto y realizó un muy buen partido defensivamente.

Tuvo buenas llegadas el United, como una a los 72’ con cabezazo desviado de Bruno Fernandes y luego otra a los 75’ con la atenta reacción de Vicario ante el disparo de Garnacho.

Así sin más, Tottenham logró aguantar el resultado y cerró el partido de gran manera para volver a levantar la Europa League por tercera vez en su historia, luego de las ediciones 1971-72, 1983-84. 

Además, también significó el fin de una larga mala racha de 17 años sin conquistar un trofeo. La última vez antes de esta había sido con la Copa de la Liga 2007/08.

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