Catalina López: «Hace 10 años era imposible ser futbolista en Chile»
La extrema derecha conversó en exclusiva con Prensafútbol sobre su carrera, sus inicios en Santiago, los títulos conseguidos y a los próximos desafíos que tendrá con Palestino, su nuevo club. Además, también habló acerca de la realidad del fútbol femenino.
Una jugadora que ha hecho méritos para buscar un lugar en el fútbol chileno femenino y que ha tenido que remar con todo en contra para poder cumplir su sueño de ser futbolista profesional. Catalina López fue bicampeona nacional con Santiago Morning y después de tener que estar un año inactiva, hoy en día se desempeña jugando en Palestino, donde espera repetir los buenos momentos cosechados con las ‘microbuseras’.
Lo joven atacante marcó un gol en la final de 2018 cuando jugaba en S. Morning y fue crucial en dicho partido donde las ‘chaguitas’ se impusieron por 3-2 ante Palestino en el Estadio Nacional conquistando el primero de los tres títulos seguidos que lograron. La jugadora de 23 años participó en las dos primeras conquistas y ahora se sinceró con Prensafútbol para hablar de sus mejores momentos y a lo que le depara el fútbol femenino.
¿Cómo fue compatibilizar tus tiempos de futbolista al mismo tiempo con tus estudios?
«En mi caso era difícil porque Santiago Morning entrenaba en la mañana y en la universidad si o si tenía clases temprano. Entonces me difícil era recuperar esas clases, por lo tanto habían días en que iba a entrenar y otros en que no. De igual manera estaba autorizada por el club entonces no tuve problema con eso, el problema era que como podía estar tan presente fui perdiendo protagonismo y costaba un montón poder destacar, iba perdiendo el ritmo».
¿Qué tan difícil es ser futbolista femenina en Chile?
«Creo que si no hubiese estado estudiando habría mejorado mucho, nunca se me pasó por la cabeza estar dedicada 100% al fútbol. Los hombres, ya sean jóvenes o de categoría adulta no tienen esos problemas, ellos si pueden estar full dedicados al fútbol. Tenía compañeras que trabajaban y estudiaban al mismo tiempo. No tenía una ayuda económica ni siquiera para el trayecto, solo cinco jugadoras en aquel entonces tenían contrato. Mi vida se resumía en estar 50/50 en el fútbol y en los estudios. Es bastante difícil y comprendo porque algunas se terminan retirando a temprana edad».
¿Cómo se vivió la llegada de la pandemia? ¿Qué tanto las apoyó el club?
«Nos apoyó bastante, no todas teníamos implementos. En ese tiempo estábamos en un hotel que le da estadía a chicas y ahí había un gimnasio. Los entrenamientos eran por Zoom e hicimos harto trabajo físico. También facilitaron implementos para algunas jugadoras, así que en ese sentido nos ayudaron bastante. Fue un cambio muy raro. Teníamos un coaching que nos motivaba y que nos mantenía la mente positiva. A mitad de año nos permitieron volver a cancha con grupos pequeños».
Finalmente tienes que dejar Santiago Morning y alejarte de tu vida futbolística
«A principios de 2021 cerré mi salida del club tras no ser considerada por Paula Navarro. No tenía mucho rodaje y además, tenía mi último año en la universidad entonces me enfoqué netamente en ello. Quería irme a Barnechea a préstamo, pero me quedaba muy lejos y ese club no alcanzó a inscribirse en los plazos estipulados, era nuevo. Todo se dio para que dejara parada la pelota, aunque siempre pensaba en que quería volver, no había un día en que no extrañara jugar».
SU REGRESO A LAS CANCHAS CON LAS ‘ÁRABES’
«De todas formas siempre supe que volvería a jugar, desde en un principio sabía que solo ese año me mantendría lejos, fue todo un sacrificio, pero valió la pena. Tras titularme empecé a buscar equipo. Quería jugar en Universidad Católica, me contacté con ellos y me dijeron que me iban a avisar y todo. No me llamaron nunca así que busqué otra posibilidad, tenía que moverme rápido porque el torneo ya iba a empezar. Hablé con gente de Palestino, amigas que tuve compañeras en el Morning. Me probé y el técnico le gustó mi rendimiento, así que me dijo que contaba para él».
Ahora con la nueva ley todos los equipos tienen que profesionalizar sus planteles, ¿tienes fe de que aportará mucho al fútbol femenino?
«Hace 10 años era imposible ser una futbolista en Chile, pero ahora con esta ley va a mejorar muchísimo la calidad de vida de algunas jugadoras. La ayuda monetaria siempre va a ser necesaria, sobre todo con las chiquillas que están trabajando o están estudiando. Le da el poder decidir a ellas si se quedan con el contrato o lo complementan con algún otro trabajo. Yo sigo sin poder jugar con un contrato o remuneración, ahora espero poder dedicarme 100% al fútbol en un par de años más».
LOS PRIMEROS PASOS
«Partí jugando en el colegio en los talleres masculinos, siempre jugué con hombres en mi infancia. En los últimos dos años se formó la rama femenina y ahí participé en torneos regionales y comunales hasta que decidí ir a probarme al equipo Sub 17 de Santiago Morning en 2015. Al siguiente año (2016) me subieron a la categoría adulta y ahí estuve hasta el 2020».
LA FINAL SOÑADA
«Ganamos el primer campeonato en 2018. Participé en los dos primeros campeonatos que ganó el Morning. Ese día estaban las emociones a mil, lo más contraproducente es que marqué el 3-1 y literalmente teníamos liquidado el partido, pero al minuto después Palestino anota el descuento a los 89′ y tuvimos que sufrir los últimos 7 minutos, se nos vinieron los fantasmas. Fue una alegría bien grande marcar ese gol en la final».
EL BICAMPEONATO CON EL MORNING
«Ese se cerró por secretaría, no hubo playoffs ni nada. El estallido social obligó a terminarlo antes de tiempo. Faltaron partidos importantes por jugar, pero siento que fue justo el bicampeonato, teníamos un partido más que el segundo que era Colo Colo, pero le habíamos sacado una ventaja de cinco puntos. Fuimos justo campeón».
