Pablo Sánchez le puso fin a su etapa en la U. de Concepción

Molesto por la partida de jugadores importantes y que no lo escucharon con las incorporaciones que quería para el 2015, el entrenador argentino decidió abandonar el cuadro del Campanil, equipo con el que tenía contrato hasta la finalización de la temporada 2014.

Un terremoto se está viviendo estas horas en la Universidad de Concepción. Pablo Sánchez, que tenía contrato hasta diciembre de 2014, decidió renunciar como su entrenador.

‘Vitamina’ quedó muy molesto con la dirigencia por, según informa el Diario El Sur, la partidas del defensa Andrés Imperiale y el delantero Leonardo Monje, más el poco interés que existe en renovar a Sixto Peralta y Gabriel Vargas, el goleador histórico del club.

El ‘Arcángel’ tiene ofertas de Audax Italiano y Wanderers, por lo que su futuro está cada vez más lejos de la Octava Región. Ante la inminente partida del ariete, el técnico argentino había pedido a Renato Ramos, pero en los penquistas le bajaron el pulgar.

Además, el ex volante solicitó expresamente la renovación del zaguero trasandino, pero los dirigentes se habrían inclinado por el fichaje de Sebastián Roco, hoy capitán de Cobreloa.